Características especiales que las hacen únicas, bellas y fuertes.

Comenzamos el mes en el que se conmemora el día internacional de la mujer y aún continuamos bombardeados por un par de canciones que hablan sobre el empoderamiento y fuerza femenina. Claro que muchas de las que ostentamos este género las cantamos y hasta bailamos, pero ¿cómo luce realmente una mujer empoderada?

■ Tiene una sana relación consigo misma. Ya trabajó años en terapia sus heridas, inseguridades y apegos. Ya aprendió a soltar todo aquello que no es adecuado para su estabilidad emocional y pareciera que no es de muchos amigos porque se rodea únicamente de personas que le suman y le ayudan a construirse. Jamás se siente un “producto terminado”, pues toma cursos, talleres, retiros y lo que sea necesario para su crecimiento personal.

■ Ama lo que ve en el espejo. Acepta su tipo de cuerpo, su edad, el color de su piel y los cambios que producen en ella los años. Se ejercita sin obsesionarse y cuida su alimentación porque le gusta sentirse cómoda en su propia piel por eso el autocuidado es para ella una obligación.

■ Por alguna razón incomprensible para los demás, la ropa siempre le luce bien y esto es por la sencilla razón de que ya aprendió qué prendas le quedan bien y cuales a pesar de que están de moda a ella se le ven fatal. Jamás será esclava de las modas o las tendencias, usa la ropa como una manifestación de su personalidad.

■ Su lenguaje corporal es poderoso y aunque no sea una mujer bella físicamente siempre llama la atención. Notas su presencia y es imposible que pase desapercibida.

■ Puede ser enérgica y tajante en sus decisiones porque sabe poner límites y nunca permitirá que pasen por encima de ella. A pesar de esto en su trato cotidiano son amables, generosas y cálidas.

■ Se hace cargo de su vida en lo emocional, sentimental y económico. Sabe que puede estar en pareja y construir un proyecto de vida en conjunto y que perfectamente puede seguir el camino en soledad sin depender de nadie.

■ No tiene empacho en tomar sus tiempos para ella misma. Si es madre o tiene pareja no tiene el menor sentimiento de culpa por regalarse una tarde en soledad o por tomarse unas vacaciones. Se sabe merecedora
de todo lo bueno y se lo hace saber a los demás, pero por lo mismo es generosa y sabe dar lo mismo que pide.

■ Se reconoce única entre otrasmujeres porque reconoce sus cualidades, habilidades y talentos, pero además sabe rodearse de otras mujeres a las que admira y de las cuales aprende porque tienen fortalezas de las que ella carece. Pertenece a tribus donde la sororidad es natural y no tiene miedo de empoderar a otras mujeres. Jamás la verás “destrozando”a otras desde la envidia o la competencia, por el contrario levanta la voz ante las injusticias y marcha, grita y levanta la voz si es necesario.

Por último, una mujer empoderada se ve tremendamente cómoda en su propia piel, así que mi estimada lectora, ¿cómo ves si rendimos homenaje a todas nuestras predecesoras y nos empoderamos?

 

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Carmiña Mejía
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