Nuestra cultura está basada en el respeto a la naturaleza, mi corazón late con el sonido de los tambores y los sabores de mi tierra, la gente encuentra en las bebidas ancestrales la nostalgia del pasado” comenta Quetzalli Rosas, promotora cultural itinerante.
Desde hace dos años inició la venta de bebidas saludables con origen de la tierra de ahí el nombre: Proyecto Tlal-Li que en Náhuatl significa tierra. Originaria de Chiapas, Quetzalli ha recorrido el país en busca de nuevos sabores originales de cada región o lugar que conoce, “son los sabores de nuestra tierra, de ahí nació el nombre con el propósito de recuperar nuestras semillas nativas que son el maíz y el cacao como ingredientes principales”.
La iniciativa de elaborar y vender sus combinaciones fue cuando su grupo de danza prehispánica les agradaba el sabor de sus bebidas, “ellos probaron y les gustó de ahí la idea de iniciar a comercializar en pequeño pero brindado la información del origen de los productos. Tienen un precio muy accesible, Tlal-Li ofrece una variedad de bebidas que son muy nutritivas, proveen de energía y conectan con nuestras raíces. La barra de bebidas que son: el Pozol chiapaneco a base de maíz, cacao y canela. El Taxcalate una bebida del sur de Chiapas que se compone por maíz, cacao, canela, achiote y piñón, un elixir muy peculiar del que se tiene un registro en el año de 1532, conocida entonces como la bebida del amor y la alegría. El pinole, que mucha gente del estado conoce y consume pero en polvo, en este caso se disuelve en agua, es muy rico y refrescante, combinándolo con endulzantes como el piloncillo o la azúcar morena; así también el agua de cacao con un ingrediente secreto, es muy rico en magnesio, aprovechando todo lo que nos brinda la naturaleza. También ofrece otra gama de bebidas a base de maguey como son el pulque y el aguamiel, bebidas que tienen propiedades medicinales que ayudan a la buena digestión. México tiene una variedad muy grande de bebidas tradicionales ancestrales, la idea de Quetzalli Rosas es ampliar su experiencia y diversidad culinaria, para continuar con este rescate histórico a través de las bebidas, defendiendo lo que nos pertenece.