POR Dr. Luis Huerta FOTOS Rolando Mejía
Son cuatro principales líneas que un Anestesiólogo debe de cuidar en un procedimiento quirúrgico: primeramente según las condiciones individuales de cada paciente adecuar el tipo de anestesia necesaria acorde al tipo de operación; la segunda la monitorización continua durante la cirugía; la tercera y más importante la seguridad y la vida de nuestros pacientes y por último los cuidados post quirúrgicos, que a su vez influyen directamente en el tratamiento del dolor. El dolor es definido por la Asociación Internacional para el Estudio del Dolor, conocida por sus siglas en inglés IASP como una experiencia sensorial y emocional no placentera, asociada con daño real del tejido. Por su parte, el dolor agudo es definido como dolor de reciente aparición y probablemente de limitada duración.
El tratamiento satisfactorio del dolor postoperatorio es uno de los retos más importantes que permanecen en el ámbito quirúrgico. Es una evidencia innegable que la mayoría de los pacientes que se someten a una intervención quirúrgica lo padecen en un grado variable. La importancia de su tratamiento se fundamenta en la posibilidad potencial de producir complicaciones dadas por los cambios rápidos en las respuestas de los pacientes. El control adecuado del dolor agudo postoperatorio implica una disminución de las complicaciones, para el paciente y sus familiares el tener una estancia hospitalaria sin dolor mejora el ambiente y la relación personal; además de influir en la disminución de la estancia hospitalaria que se traduce en menos gasto, desgaste para el paciente y su familia.
Cada vez se impone con más fuerza el tratamiento que avala la elección del método de alivio del dolor postoperatorio,que debe ser balanceada, combinándose diferentes vías de administración y diferentes fármacos analgésicos o anestésicos, esto debe de ser instaurado desde antes de la cirugía por el Anestesiologo. Cuando dichos elementos se combinan, es posible emplear dosis más pequeñas y, así, minimizar los efectos colaterales, además de ofrecerles a nuestros pacientes mayor seguridad y bienestar.
En esto se basa la llamada «analgesia balanceada o multimodal», con ventajas superiores al empleo de un solo medicamento, sobre todo cuando si implica diferentes sitios y mecanismos de acción. Otro concepto es el de «analgesia preventiva», sugiere que la administración de opioides y/o anestésicos locales antes de la cirugía podría reducir la descarga de dolor asociada con la incisión Quirúrgica y, de esta manera, la intensidad del dolor postoperatorio. La experiencia nos dicta que la analgesia preventiva y multimodal se debe de introducir y realizar en cada paciente mediante agentes que afecten la inflamación periférica, bloqueen la actividad de los nervios que llevan la información del dolor al cerebro y modulen los procesos del dolor a nivel cerebral.
¿Que tiene que hacer un paciente antes de su cirugía?¿ Como puedo saber si voy a tener dolor o no ? Son estas algunas de las preguntas que nos hacemos antes de ser sometidos a un procedimiento quirúrgico. Es importante como paciente conocer a nuestro Anestesiólogo, preguntarle todas las dudas y conocer el plan anestésico a seguir, además de la estrategia recomendada por el especialista, para evitar la presencia de dolor.