Con el objetivo de preservar uno de los bosques más importantes de la capital y dar a conocer sus virtudes y lo mágico que puede llegar a ser, se organizó el evento Rodeo Fest 2019 con múltiples actividades donde destacaron la cultura, el arte y la gastronomía.
Un ambiente bohemio y familiar envolvió el Parque Niños Héroes de Chapultepec, mejor conocido como “El Rodeo” durante 17 días. Entre los inmensos árboles familias, parejas y grupos de amigos disfrutaron de música, folklor, espectáculos y comida en un ambiente mágico que mostró lo que es la capital colimense.
Este evento se llevó a cabo a la par de la Feria de Todos los Santos, sin embargo, el Ayuntamiento de Colima quiso recuperar este espacio haciendo un lugar inimaginable con un ecosistema único en la ciudad capital.
“Anteriormente este espacio se utilizaba para tomar alcohol o estacionamiento, pero nosotros decidimos que este año lo que haríamos sería ambientar esta Feria de Colima con este espíritu del bosque y que las personas que vinieran a dejar sus autos, se permearan de lo que este espacio puede dar”, señaló Azucena López Legorreta, Presidenta del DIF Municipal de Colima.
Una vez que pisaron los visitantes este espacio arbolado pudieron disfrutar de más de 30 negocios , totalmente colimenses, que ofrecieron infinidad de servicios entre los que destacaron platillos singulares que deleitaban al paladar acompañados de bebidas burbujeantes que combinaban a la perfección. Además los asistentes apreciaron el trabajo de los artesanos, muchos de ellos se colocaron en un remolque del ayuntamiento capitalino, donde lo recaudado se donó a personas necesitadas, así como a asociaciones civiles.
“Cuando asistieron las familias a este lugar se les garantizó un espacio donde la paz fluía entre los espacios bajo el cobijo de los hermosos árboles. Pudieron encontrar que los juegos y comedores están ahora restaurados y en perfecto estado”.
Entre los cambios que se realizaron, la presidenta destaca la transformación de varios espacios de esta zona con el objetivo de que las familias se divirtieran bajo el esquema de cultura, arte y naturaleza.
Uno de los atractivos de este festival fueron los escenarios. Uno de ellos está construído con piedras en un estilo romano, que lamentablemente por el paso de los años se descuidó, sin embargo con esta fiesta se enalteció su decoración; a esta zona lo llamaron “Aldea Capital”.
“Ese escenario es realmente hermoso, es para tres mil personas y estaba en el olvido, así es que se ha ido recuperando y hoy se puede gozar de este espacio realmente impresionante que está hacia el noroeste del parque”.
En este escenario se encontraron bares como el DMT o La Burra Roja basando su servicio en la sustentabilidad, es por ello que siguiendo este esquema se reciclaron los insumos y se dieron vasos biodegradables.
Siguiendo el camino central se posicionó un escenario más, bajo el nombre de “Aldea Familiar” donde se expusieron artistas con espectáculos que subrayaron la incidencia de protección hacia este espacio.
“Para nosotros es muy importante que quienes pasearon por esta aldea familiar hayan disfrutado de las diferentes actividades que tuvimos como el gotcha o tiro al blanco así como la aldea gammer”.
Gracias a las más de 400 actuaciones y actividades variadas, los cientos de presentes disfrutaron de un mundo fantástico que creó un espíritu en el bosque más importante de la capital colimense.
“Este espacio es para el disfrute de todas las familias y no como se venía haciendo para favorecer a cierto grupo de personas con actitudes o actividades que a pocos nos interesa”.
También la presidenta destacó que es importante que las familias se apropien del espacio y que sepan que este bosque es de todos los colimenses, por lo que pide a los ciudadanos que cuiden la zona y lo quieran.
“Lo que sigue es esa ruta para que cuando las familias regresen a este lugar tengan ese respeto para este sitio, que sepan dónde deben dejar sus residuos en cada uno de los botes, pero siempre, teniéndole amor a algo que realmente es nuestro”.
