DR. JOEL CASTELLANOS GÓMEZ
  • Egresado de la Facultad de Medicina de la Universidad de Guadalajara
  • Especialidad en Ortopedia y Traumatología post graduado del Centro Médico de Occidente. Guadalajara Jalisco
  • Certificado por el Consejo Mexicano de Traumatología y Ortopedia
  • Miembro de la Federación Mexicana del Colegio de Ortopedia y Traumatología (FEMECOT)
  • Miembro Internacional del American Academy of Orthopaedic Surgeons(AAOS)
  • Expresidente del Colegio de Traumatología y Ortopedia de Colima
  • Fundador de la Clínica de Hombro y Codo de más de 15años de experiencia institucional y privada

La articulación del hombro ha tenido un estudio más detallado en los últimos 15 a 20 años por afectar a personas jóvenes que sufren lesiones en el deporte, laborales o accidentales y a personas con edad más avanzada que presentan degeneración articular por diferentes causas. El deterioro funcional y la sintomatología incapacitante que provoca se ha convertido en un trastorno de primera necesidad en la atención médica.

Los trastornos del hombro deben ser tratados por el médico ortopedista con la experiencia en este campo para realizar un estudio detallado de las condiciones que presentan los pacientes, ya que existen diferentes parámetros y grados de afección en las estructuras del hombro. El planteamiento de un buen tratamiento está determinado por los estudios paraclínicos necesarios que van desde radiografías simples, radiografías especiales, ultrasonido y resonancia magnética.

La condición clínica de un paciente determina el grado de afección presentado y será la capacidad del ortopedista con un excelente juicio, decidir cuál es el tratamiento ideal de acuerdo a medicina basada en evidencia y experiencia.

La prevalencia del dolor del hombro en la población general va de un 4% a un 20%, llegando ocasionalmente hasta un 30% en estudios hechos donde se incluyen también las lesiones de espesor parcial. La evidencia actual sugiere que las lesiones se producen por mecanismos más complejos a como se pensaba inicialmente, ya sea por problemas tendinosos primarios o por una disfunción del hombro.

Mediante la técnica artroscópica como potente herramienta que diagnostica, identifica y ofrece tratamiento para rupturas parciales, rupturas complejas, patología del bíceps o alteraciones de estabilidad, se logró en los últimos 15 años resultados muy favorables.

En la reconstrucción articular del hombro se pueden encontrar afecciones en todos los grupos de edad secundario a accidentes, enfermedades o trastornos degenerativos. La reconstrucción del manguito rotador es uno de los más frecuentes y se realiza mediante artroscopia con un resultado bastante exitoso. Las claves para un buen resultado son la combinación de una indicación adecuada, una buena técnica y un estricto protocolo de rehabilitación.

Durante el procedimiento artroscópico el primer paso es identi car el patrón de la lesión y definir la estrategia para su reparación. Tras esto, el cirujano ortopedista debe preparar la huella de la inserción del manguito rotador y usar una técnica de reparación que mejore el contacto tendón-hueso. Es fundamental conseguir una reparación libre de tensión, buena superficie de contacto, buena jación ya sea en simple row o double row.

En el post operatorio es esencial un protocolo de sioterapia que proteja la reparación tendinosa y a su vez logre incrementar el arco de movimiento; obviamente el cirujano ortopedista deberá tener el adiestramiento para monitorizar con ultrasonografía la evolución y el grado de cicatrización de la reconstrucción.

En circunstancias más avanzadas en la enfermedad del hombro se puede encontrar un deterioro del cartílago articular donde el paciente experimenta dolor, movimiento limitado y rigidez. El cirujano especializado en hombro podrá determinar si el paciente es candidato todavía a reconstrucción o, a reemplazo articular (prótesis total de hombro).

Cuando los medicamentos, la sioterapia y otros métodos de tratamiento entre ellos, el tratamiento artroscópico ya no alivian el dolor, es posible que sea el momento de considerar el reemplazo del hombro que está diseñado para ayudar a brindar alivio del dolor y libertad del movimiento. Cada vez más pacientes vuelven a tener un estilo de vida más activo gracias a los avances en los materiales y los procedimientos utilizados en el reemplazo del hombro. Actualmente el reemplazo del hombro es el tercer tipo más común de reemplazo articular.

Puede beneficiarse de un reemplazo del hombro en los siguientes casos:

  • El dolor en el movimiento no solo limita el trabajo y las actividades sino que también afecta las actividades diarias de la vida normal.
  • El sueño se ve alterado por el dolor del hombro o del brazo.
  • No se logra aliviar el dolor mediante los medicamentos, las inyecciones o la fisioterapia.
  • El hombro se encuentra rígido y el movimiento del brazo es limitado.
  • Puedehaberunasensacióndefricción o trabamiento cuando la superficie de los huesos se mueve una contra la otra.
  • Los estudios radiológicos o de resonancia magnética mostraran la gravedad del problema.

En la cirugía del reemplazo total del hombro, la esfera del hueso de la parte superior del brazo (cabeza del húmero) y la super cie articular de la escápula (glenoide) se reemplazan por componentes especialmente diseñados.

Las condiciones propias de la afección de su hombro determinarán si se reemplaza con hemiprótesis con vástago, prótesis total, hemiprótesis de resurfacing o prótesis reversa.

Pero en definitivo cada caso se debe individualizar. para que con ayuda de un cirujano especialista en hombro con experiencia otorgue el mejor tratamiento de reconstrucción o de reemplazo en la enfermedad articular del hombro.

RECONSTRUCCIÓN

REEMPLAZO


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