Juntos en la prevención contra el cáncer

 

Cáncer de mama

PREVENCIÓN Y TRATAMIENTOS EN LA LUCHA CONTRA EL CÁNCER

 

El cáncer de mama se origina a partir del crecimiento descontrolado e independiente de las células que forman un tumor maligno que puede invadir tejidos circundantes y también órganos distantes (metástasis).

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce al cáncer de mama como el tipo de cáncer más común en el mundo.

Con el objetivo de fomentar la autoexploración mamaria y la detección temprana, así como promover el acceso a controles, diagnósticos y tratamientos oportunos y efectivos, la OMS designó el 19 de octubre como el Día Mundial de la Lucha Contra el Cáncer de Mama.

La sintomatología del cáncer de mama o seno puede ser muy variada, desde un pequeño bulto o una inflamación hasta pequeños cambios en la piel, incluso algunos tipos de cáncer no presentan síntomas evidentes en sus inicios.

De acuerdo con la Sociedad Americana Contra el Cáncer, cualquiera de los siguientes cambios inusuales pueden ser un síntoma de cáncer de mama:

• Inflamación de la mama o parte de ella
• Irritación cutánea o formación de hoyos
• Dolor de mama
• Dolor en el pezón o inversión del pezón
• Enrojecimiento, descamación o engrosamiento del pezón o de la piel de la mama
• Una secreción del pezón que no sea leche
• Un bulto en las axilas

Estos cambios pueden ser también indicios de afecciones menos graves y no cancerosas, como una infección o un quiste.

Si se tienen más de 40 años o un riesgo alto de padecer cáncer de mama, también se debe realizar una mamografía y someterse a un examen físico con un médico. Cuanto más temprano se descubre y diagnostica el cáncer de mama, más posibilidades se tienen de vencerlo y completar un tratamiento con éxito.

 

FACTORES DE RIESGO

Los factores más comunes que influyen en el riesgo de desarrollar cáncer de mama son:

  • Historial previo de enfermedades de mama
  • Historial familiar de enfermedades de mama
  • Edad
  • Raza
  • Ser mujer
  • Exposición a radiación
  • Factores dietéticos
  • Historial reproductivo y menstrual

Los efectos relativos de estos y otros factores de riesgo en cualquier caso de cáncer son variables y muy difíciles de determinar con precisión.

 

DETECCIÓN Y DIAGNÓSTICO

 

El cáncer de mama es el cáncer más común entre mujeres. A pesar de las grandes estadísticas, las tasas de mortalidad por cáncer de mama han ido disminuyendo desde 1990. Esto se debe en gran parte a los métodos de detección precoz, técnicas avanzadas de diagnóstico y tratamiento mejorado.

Las tres formas principales para detectar el cáncer de mama son: autoexamen, examen clínico y mamografía. Dado que ningún método es 100% efectivo, se sugiere que los tres se usen regularmente.

Los avances en el tratamiento del cáncer de mama se ven facilitados por los conocimientos adquiridos a partir de la biopsia y la patología de tumores. Estas técnicas permiten a los médicos desarrollar tratamientos individuales para cada paciente en función de su biología tumoral distintiva. Constantemente se investigan nuevas técnicas para mejorar la detección, el diagnóstico y el tratamiento del cáncer de mama.

 

Tratamiento

 

El tratamiento del cáncer de mama se puede dividir en dos categorías: etapa temprana y etapa avanzada. El tratamiento en etapa temprana involucra tumores que se limitan a la mama. El tratamiento en etapa avanzada
involucra tumores que se han diseminado más allá de la mama a otras regiones del cuerpo. Esta propagación se conoce como metástasis. Las opciones de tratamiento dependen del tamaño y ubicación del mismo, la condición física del paciente, y la etapa del cáncer.

 

Tipos de tratamientos

 

CIRUGÍA
La cirugía es utilizada comúnmente para remover crecimientos cancerígenos o para obtener pequeñas muestras de tejido para su examinación.

Para varios tipos de cáncer, la remoción quirúrgica del tumor puede ser suficiente para curar al paciente. La probabilidad de una cura quirúrgica depende del tamaño, la localización y la etapa de la enfermedad.

Cuando se remueve un tumor, el cirujano intenta quitar lo más que se pueda del tumor. La cirugía se utiliza generalmente en combinación con la radiación y/o la quimioterapia. La elección de los tratamientos depende del tipo, localización y tamaño del tumor.

RADIOTERAPIA EN CÁNCER DE MAMA

La radioterapia es un tratamiento con rayos o partículas de alta energía que destruyen las células cancerosas. Algunas mujeres con cáncer de mama necesitarán radiación, además de otros tratamientos. La radioterapia se utiliza en varias situaciones:

• Después de la cirugía con conservación del seno para ayudar a reducir la probabilidad de que el cáncer regrese en el mismo seno o en los ganglios linfáticos adyacentes.

• Después de una mastectomía, especialmente si el cáncer medía más de 5 cm, o si se encuentra cáncer en muchos ganglios linfáticos, o si ciertos márgenes quirúrgicos tienen cáncer, como los de la piel o los músculos

• Si el cáncer se ha propagado a otras partes del cuerpo, como huesos o el cerebro.

TIPOS DE RADIACIÓN PARA CÁNCER DE MAMA

Irradiación parcial acelerada de la mama.

En mujeres seleccionadas, la irradiación parcial acelerada de mama (APBI) para dar dosis más elevadas durante un tiempo más corto a solo una parte del seno en comparación con todo el seno.

Radioterapia intraoperatoria (IORT).

Mediante este método, se administra sólo una dosis grande de radiación en el área donde se extrajo el tumor mientras se encuentra en el quirófano justo después de la cirugía con conservación del seno (antes de cerrar la incisión en el seno). La IORT requiere equipo especializado y por lo tanto no está ampliamente disponible.

Radioterapia conformada en 3D (3D-CRT).

En esta técnica, la radiación se administra con máquinas especiales de manera que sea mejor dirigida al área donde estaba el tumor. De esta manera se preserva más el seno sano. El tratamiento se administra una vez al día por 5 días.

Radioterapia de intensidad modulada (IMRT).

La IMRT es similar a la 3D-CRT, pero también cambia la potencia de algunos de los haces en ciertas áreas. Esto hace que se administren potentes dosis a ciertas partes del lecho tumoral y ayuda a reducir el daño a los tejidos corporales normales adyacentes.

Braquiterapia. La braquiterapia, también conocida como radiación interna, es otra manera de administrar radiación. En lugar de aplicar los rayos de la radiación desde el exterior del cuerpo, se coloca un dispositivo que contiene semillas o perdigones radiactivos por un corto tiempo en el tejido mamario del área donde se extrajo el cáncer (lecho tumoral).

 

Contra el cáncer de mama

 

QUIMIOTERAPIA
El término ‘quimioterapia’, o ‘quimio’, se refiere a una gran variedad de fármacos empleados en el tratamiento del cáncer. Estos medicamentos normalmente funcionan al matar las células en división. Ya que las células cancerígenas no poseen muchas de las funciones regulatorias presentes en las células normales, estas continúan dividiéndose cuando las otras células ya no lo hacen.

La función de estos agentes quimioterapéuticos consiste en causar la muerte celular en una variedad de maneras. Algunos de estos medicamentos son compuestos naturales que se encuentran en varios tipos de plantas, y algunos son químicos artificiales.

HORMONOTERAPIA
Las células cancerosas, a pesar de ser anormales, pueden retener la habilidad para responder a las señales hormonales. La idea detrás de la mayoría de los tratamientos para el cáncer basados en hormonas es privar a las células cancerosas de las señales que podrían estimularlas a dividirse. Los medicamentos usados en estos tratamientos bloquean la actividad hormonal en la célula objetivo. Algunos tratamientos más novedosos y bajo investigación son diseñados para prevenir la producción de la hormona en sí, interrumpiendo la señal desde el principio. Algunas formas de cáncer de mama, ovario y próstata son sometidas a tratamientos hormonales.

Los tratamientos hormonales descritos en este capítulo son generalmente utilizados en combinación con cirugía y/o radiación y/o quimioterapia. En estas situaciones, los tratamientos hormonales son considerados como un tratamiento auxiliar.

TERAPIA CON ANTICUERPOS
MONOCLONALES
El desarrollo de las terapias dirigidas representa un nuevo e interesante enfoque en el tratamiento del cáncer. Mientras que algunos medicamentos ya han sido aprobados por FDA, muchos otros se encuentran bajo investigación mediante ensayos clínicos.

La combinación de estos fármacos altamente específicos y capaces de atacar una debilidad del tumor en particular, con la quimioterapia estándar que proporciona un poderoso ataque al tumor, puede ser una excelente forma de tratar el cáncer.

Testimonios de vida

 

MARÍA ISABEL DE LA CRUZ ALFARO

A finales del 2018 sin querer me descubrí una bolita, nunca estuve acostumbrada a explorarme. Así inició la lucha contra el cáncer.

Han sido 3 años de continuar en revisión, de ir y venir, de citas y estudios frecuentes, pero gracias a Dios y a la actitud positiva que he tomado y a la gran atención médica, vamos ganando, mis órganos están limpios y espero así sigan.

Ojalá que las mujeres que enfrenten esta situación sean optimistas porque esta actitud es ya una gran parte de ganar la batalla.

 

ANA EVELIA CAMACHO BEAS
Primeramente doy gracias a Dios por existir después de ese mal. Gracias a mi familia por tanto amor y apoyo, y gracias a mis doctores que han sido mis ángeles.

Mi experiencia con lo que me pasó y sigue pasando, es que te enfrentas a algo desconocido y doloroso que afecta de alguna manera a toda la familia, sin embargo poco a poco se asimila que debes tener actitud para seguir adelante sabiendo que la vida es corta y en cualquier momento se pierde.

Ahora, trato de vivir y disfrutar los días, pedir al cielo que me regale la salud, que es el tesoro más preciado y decirles a todos los que pasan por esto ¡Si se puede! porque mientras haya vida hay esperanzas.

 

SARAHÍ MARGARITA MÉNDEZ RAÍZ
Para mí el cáncer es una lección de vida, pues aprendí a valorar cada instante por insignificante que parezca, a pesar de los problemas tuve fe, un sentimiento que comienza con el conocimiento de Dios y genera la absoluta confianza en él.

Hoy puedo decir. “Yo confié y vencí” deposité toda mi fe en mis médicos y en la ciencia, sobre todo en mí doctor César Córdoba, pues siempre he tenido la seguridad de que Dios obra en él y en todo el equipo de salud que Dios incluyó en mi lucha, estaré eternamente agradecida con él y con el personal de la Clínica Córdoba, porque ahí aprendí qué el cáncer no se evita, pero si se cura. (Con una detección temprana) ¡Explórate!