Una oportunidad para disfrutar de la frescura del bosque y poder degustar las diferentes variedades de hongos comestibles.

POR AARÓN ANDRADE RAMÍREZ

A inquietud de los habitantes y ejidatarios de la comunidad del Terrero y con el apoyo de la comisión de áreas protegidas desde hace cinco años se inició con este proyecto para celebrar una Feria Regional del Hongo en el Cerro Grande, una pequeña zona de la sierra de Manantlán que forma parte del municipio de Minatitlán, lugar en donde es muy característico encontrar la formación de hongos de todo tipo debido a la gran cantidad de humedad que existe en el ecosistema con la llegada del temporal de lluvias.

Los lugareños conocen perfectamente bien las distintas variedades de setas, realizando durante el evento una demostración y explicando cuáles hongos se pueden consumir y cuáles no, dependiendo de sus características físicas y su composición. Entre los más comunes se pueden encontrar el champiñón silvestre, cola de pavo, melena de león, coral rosado, entre otros…

“No se tiene el dato exacto del número y variedad de especies de hongos que nacen en el Cerro Grande pero se debe tener cuidado al consumirlos, porque aunque muchos son comestibles también se pue- den encontrar algunas variedades que son tóxicas para el consumo humano.” Advirtió Manuel Palacios Rodríguez, secretario del ayuntamiento de Minatitlán.

Los visitantes pueden disfrutar de una naturaleza impresionante, recorridos por los diferentes senderos, un puente colgante sobre una gruta de más de 80 metros, un deslizadero conocido como el filete, además de la gran variedad de comida en donde se puede degustar este delicioso manjar del reino fungi, como la quesadilla de hongos, pozole de hongos, hongos asados, en diferentes guisos y presentaciones además de la cocina tradicional, tamales de carne, toqueras y muchas cosas más.

En esta edición de la Feria Regional del Hongo 2019 se recibieron a más de 4000 visitantes que se dieron cita en el Terrero y Lagunitas durante dos fines de semana, dejando una derrama económica importante para la gente de las comunidades de Cerro Grande dedicadas principalmente a la producción y corte de madera, el cultivo de hortalizas, la siembra y la ganadería.

Esta festividad es una gran oportunidad de convivencia familiar, en donde además se llevaron a cabo eventos culturales y recreativos para disfrutar de la frescura del bosque y fomentar el cuidado del medio ambiente.