POR AleTorres Coach en cambio de hábitos, mamá bloguera, comunicóloga y alumna del Centro de Kabbalah México.

aletorres111@gmail.com www.aletorresblog.com

Definitivamente, de las mejores cosas que he aprendido con la maternidad, es a gestionar el tiempo. Antes, me confiaba a un horario de trabajo establecido y era más fácil estructurar la rutina, pero quien marcaba la pauta, era mi empleo y no yo (cosa bastante entendible).

Cuando me convertí en mamá y dejé de ser empleada, me tardé meses en asimilar lo que iba a hacer todo el día en casa. Ya saben, esa lucha entre “es que el bebé no me deja hacer nada y qué es lo que en verdad hay que hacer”, porque además, había que elegir entre cosas de casa o el famoso “mommy time”.

¿Alguien dijo estrés? Ingrato, casi me deja pelona… por eso fue que puse manos a la obra a esto de la organizada y priorizada que, créanme, ha dado muy buenos resultados:

Primero, he dejado de ir contra-reloj, soy más consciente del día que vivo, de lo que deseo y lo que no. Segundo, el ambiente en casa está más relajado y, tercero, puedo jugar con mi hija -que luego una cree que cuando crecen son menos demandantes y ¡no!-

En conclusión, una se siente mejor y rinde más, cosa que en casa agradecen y, por eso, es que quiero compartirles estos 5 efectivos trucos que, espero les sean de utilidad:

1. Cómprate una agenda o cuaderno y destina una página para cada día.
2. Establece una rutina y escríbela. Sé realista y coloca primero las obligaciones de mamá, pero dales un horario establecido y respétalo.

3. Haz una tarea a la vez. Ya sé, yo también levanté las cejas cuando vi esto y, todavía hoy, me lo digo como mantra cuando me descubro pensando una cosa, diciendo otra y haciendo otra… Pero la práctica hace al maestro.

4. Empieza por lo más rápido. Hay actividades que no necesitan mucho de nuestro tiempo y cuando están hechas, nos dejan más tranquilas.

5. Lo “urgente” vs. “importante. Tenía un jefe que decía que no había cosas urgentes, sino tontos con prisa (tal cual, jeje) Pero hay otro personaje más conocido, Eisenhower, que creó un modelo básico para priorizar las cargas de trabajo.

EL PRINCIPIO EISENHOWER

Dwight Eisenhower fue un general de las fuerzas aliadas en Europa durante II Guerra Mundial. Hizo muchas cosas más, pero creó un modelo que partía de la eliminación de todas las cosas que había que hacer y empezar de cero: mente en blanco y tener un objetivo final.

Es su estrategia de productividad más famosa, conocida como la Caja de Eisenhower que ayuda a la toma de decisiones simples y separa las acciones en cuatro posibilidades, quedando así:

• Urgente e importante (tareas que harás de inmediato)

• Importante, pero no urgente (tareas que puedes hacer después)

• Urgente, pero no importante (tareas que puedes delegar a alguien más)
• Ni urgente ni importante (tareas que puedes eliminar)

En mi opinión, las tareas “urgentes” son muy reactivas y las “importantes”, más proactivas. Así que implementando par- te de esto, he organizado un poco más mi vida (sobre todo en las redes sociales). No, no me encanta estar pegada al celular y a la computadora, pero los aprecio tanto, porque me permiten aprender y compartir mucho. El chiste es no cederles el control y usarlos a ellos; no al revés.