Históricamente es una pieza fundamental para el ser humano, un buen calzado no solo debe ser perdurable, también debe garantizar comodidad e imagen durante la rutina diaria.

Se tienen registros de que el hombre prehistórico encontró la forma de proteger sus pies, lo que nos indica que el calzado pudiera tener aproximadamente 15,000 años de antigüedad.

En el antiguo Egipto las sandalias se hacían con paja trenzada o láminas de hoja de palmera. En la antigua Grecia, Homero describía a los héroes de guerra luciendo lujosas sandalias.

Los zapatos también han sido durante siglos una pieza de control y de tortura para las mujeres: en la China antigua, se le impuso a las niñas una tabletilla que impedía que su pie creciera de forma natural para conseguir una deformación que ellos llamaban “flor de loto”.

En la antigua Roma, las mujeres poderosas utilizaban calzado lleno de joyas preciosas, y en la Roma clásica los zapatos de color rojo eran llevados únicamente por las cortesanas.

A finales de la Edad Media, las mujeres empezaron a andar sobre zapatos con plataformas, eran tan altas que necesitaban hacerlo de la mano de un chalán y las caídas eran frecuentes. Los hombres fueron los primeros en usar los zapatos de tacón y estos se han reinventado al paso de los siglos. El tacón ha influido en las mujeres hasta en su forma de caminar ya que modifica la disposición del cuerpo.
Algunas consideraciones que debemos tomar en cuenta sobre el calzado:

• Los zapatos hablan mucho sobre nuestra personalidad y hábitos, por lo que es importante mantenerlos siempre limpios y lustrosos.

• Debemos utilizar zapatos con los que nos resulte cómodo caminar, el malestar de los pies se nota en nuestro semblante y en el estado de ánimo que proyectamos.

• Utilizar zapatos de nuestra talla es fundamental, ya que indistintamente de que nos queden chicos o grandes, causan daños en la salud de nuestros pies.

• Para el ambiente laboral es importante usar zapatos cerrados cuando vestimos pantalón de vestir, si somos de baja estatura procuremos que sean del color más parecido al pantalón.

• Si queremos enviar mensajes de liderazgo o poder, compremos calzado de la mejor calidad que nuestro presupuesto nos permita.

• Evitemos tacones pelados, tenis sucios o zapatos en mal estado. Es mejor un par de zapatos en buen estado a una variedad de ellos en pésimas condiciones.

• Seamos cuidadosos con el aspecto de nuestros pies, sobre todo en verano que usamos sandalias, está de más decir lo desagradable que lucen unos pies descuidados.

• Están de moda los tenis para todos los ámbitos, procuren que estos no sean los que utiliza para ejercitarse y que siempre estén en buen estado y limpios.

¿Y ustedes cuál calzado prefieren usar?