Sandra Niño de Rivera Torres
P O R Aarón Andrade Ramírez

Decidió emprender con una escuela de baile en el año 2007, como una necesidad para

desarrollarse artísticamente. Sandra Niño de Rivera estudió danza escénica en la Universidad de Colima. “Al terminar mi carrera yo tenía que hacer algo para seguir bailando, fue así que abrí el estudio de baile Attitude Colima, preocupándome por traer cosas nuevas a nuestro estado”.

Los alumnos en la danza son motivados para alcanzar un desarrollo personal, se trabaja de manera particular fortaleciendo su autoestima, su seguridad y confianza, pero sobre todo en desarrollar “disciplina” que es un factor necesario para lograr el éxito en todas las áreas de la vida.

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Es importante asistir a teatros y a eventos artísticos, tener amor por la cultura, así fue como inició Sandra Niño de Rivera, siendo una espectadora. “Tenía como 16 años y fue que me puse a investigar para intentarlo; empecé en danza contemporánea y afortunadamente me encontré con un grupo maravilloso y con Lucía Arciniega Hernández, una maestra muy especial e importante en la licenciatura, en esos momentos fue entender y enamorarme de la danza”.

“La danza es una disciplina que genera conciencia corporal y mental, es una serie de movimientos al ritmo de la música que permiten expresar sentimientos y emociones; además de ser un ejercicio que ayuda a mantener la salud física en óptimas condiciones”.

El baile es para todos y si tienes aptitud y actitud es mejor, a la escuela Attitude acuden personas de todas las edades, desde niños de 3 años, jóvenes que estudian o ya egresaron de sus carreras, y adultos que quieren explorar, desarrollarse y aprender.

La escuela cuenta con un gran salón totalmente adecuado y ventilado para poder desenvolver los movimientos necesarios en las clases de jazz, danzas urbanas, circo y danza aérea, un espacio alternativo y multifuncional.

“Como ejecutante me fascina, sobre todo, lo que he elegido como especialidad, la danza aérea; me encanta ver a mi público y la cara de los pequeños, en donde me veo reflejada. En mi niñez no existía tanta difusión y me parece importante que inicien a temprana edad buscando sus talentos, contagiarse y acudir a un estudio para poder hacerlo”.

“Como maestra me gusta darle a los alumnos la oportunidad para demostrar lo que son capaces de hacer, mejorar la imagen que tienen de sí mismos, y enseñarles a valorarse con sus cualidades y defectos”.

La danza es una disciplina que requiere de esfuerzo, dedicación, atención y mucha energía, una cuestión de actitud que con el tiempo genera excelentes resultados.